7 opciones de desayunos altos en proteínas

¿Que son las proteínas?

Las proteínas son como las superestrellas de la nutrición, ¡de verdad! Son moléculas enormes y complejas que están formadas por aminoácidos. Imagina que los aminoácidos son las piezas de un rompecabezas y, al unirlas, formas una proteína. Estas moléculas son esenciales para casi todas las funciones en nuestro cuerpo. Desde el crecimiento del cabello hasta la reparación de tejidos, las proteínas están en todas partes.

Lo más interesante es que no solo ayudan a construir músculos. También son fundamentales para nuestro sistema inmunológico, ya que producen anticuerpos que nos protegen de enfermedades. Además, actúan como mensajeros y transportadores, llevando nutrientes y señales de un lugar a otro en nuestro cuerpo. Sin ellas, estaríamos un poco perdidos, la verdad.

¿Y de dónde obtenemos estas maravillas? Pues de lo que comemos, claro. Alimentos como carnes, huevos, lácteos, legumbres y nueces son ricos en proteínas. Así que la próxima vez que te prepares una ensalada con pollo o un batido de proteínas, recuerda que estás dándole a tu cuerpo esas piezas esenciales que necesita para funcionar como un reloj suizo. ¡Y eso no es cualquier cosa!

7 desayunos altos en proteínas:

Aquí te dejo siete opciones de desayunos proteicos que te van a encantar y te ayudarán a empezar el día con energía:

Batido de proteínas: Mezcla una scoop de proteína en polvo (de preferencia de suero de leche o vegetal), una taza de leche de almendra, una banana, una cucharada de mantequilla de maní y hielo. ¡Delicioso y rápido!
Tostadas con aguacate y huevo: Tosta un par de rebanadas de pan integral, úntales aguacate y coloca un huevo pochado encima. Agrega un poco de sal y pimienta, y tendrás un desayuno rico en proteínas y grasas saludables.
Yogur griego con granola y frutas: El yogur griego es una excelente fuente de proteínas. Acompáñalo con una porción de granola baja en azúcar y tus frutas favoritas como fresas, arándanos o plátano.
Avena con claras de huevo: Cocina avena como lo haces normalmente y, cuando esté casi lista, agrega claras de huevo. Cocina unos minutos más hasta que las claras se incorporen bien. Puedes endulzar con un poco de miel y añadir algunas nueces o almendras.
Smoothie bowl de proteína: Prepara un smoothie espeso con proteína en polvo, leche de tu elección, espinaca, y plátano. Vierte en un tazón y decora con semillas de chía, coco rallado, y bayas.
Panqueques de avena y claras de huevo: Mezcla avena, claras de huevo, un poco de canela y una banana. Cocina en una sartén antiadherente y disfruta con un poco de miel o frutos rojos.
Tortilla de espinacas y queso: Bate un par de huevos y agrégales espinacas frescas y un poco de queso bajo en grasa. Cocina en una sartén hasta que esté dorada y el queso derretido. ¡Es una opción sabrosa y nutritiva!